Estos tiempos son los tiempos de la globalización, esa palabra mágica que se escucha en todos los medios de comunicación y que suena tan fea. No se si será buena o no lo será, sólo se que, en el tipo de sociedad capitalista en que nos basamos, estamos condenados a estar más unidos que nunca porque la política es más mundial que personal y si no nos abrimos al exterior estamos condenados a morir en nuestra concha en soledad rodeados por un mundo que nos dará la espalda en el momento que lo necesitemos sin poder estar a la altura de las circunstancias. Y dicho ésto, rompo una lanza en favor de las comunidades autónomas ya que nuestra identidad se basa en ellas, gracias a ellas sabemos de donde venimos y cual es nuestra historia y con ellas está también a salvo nuestro individualismo. Pero tengamos también en cuenta que en el término medio está la virtud y si somos muy extremistas caeremos en el aislamiento que comentaba anteriormente. Primero fui catalán, ahora soy maño, pero siempre español. AAS.
